HUMAN NATURE

Sunday, June 20, 2010

'La vida de los peces'

Hay reencuentros para los que uno nunca está preparado. Pueden haber pasado meses, años, décadas, pero siempre serán intensos, inesperados y descolocadores. Uno puede imaginar qué le gustaría decir o cómo actuar, pero cuando te enfrentas a la situación las cosas suelen pasar de otra forma. De eso se trata 'La vida de los peces'.
Andrés vive en Alemania y vuelve luego de 10 años para ver a Beatriz, su antigua novia, pero una década es mucho tiempo y la vida de ambos ha cambiado. Él ahora es un cronista de viajes y vive como pasajero en tránsito, ella se casó y formó una familia. Al principio no quiere enfrentarla, tiene grandes dudas que giran en torno a este amor inconcluso. La mira desde lejos mientras evita durante mucho rato el cara a cara. Se saludan y conversan de lo que ha pasado con sus vidas, él pensó que había zafado hasta que el destino le juega una mala pasada y es ella quien lo encuentra y conversan.
Una de mis grandes amigas me dijo que 'La vida de los peces' era una película absolutamente para mi, ella la encontró lenta y audiovisualmente sucia. Y tenía razón. Los relatos de Matías Bize son así, una cámara observadora como cualquier personaje más en la escena, a quien se le puede interponer un muro, un acuario con peces que circulan de un lado para otro. El uso del silencio es un gran elemento, las pausas en algunos diálogos y el silencio del interlocutor en otros resultan conmovedoras y logramos entender por qué pasan las cosas , conectamos con Andrés o con Beatriz. Es un filme que genera cosas, la primera vez que vi el trailer lo encontré bellísimo y cuando iba en la tercera pasada terminé con una lágrima asomándose.
No tengo amores inconclusos, pero sí sé que hay reencuentros para los que uno nunca estará preparado, nunca.
Si tiene amores inconclusos o reencuentros pendientes vaya a ver 'La vida de los peces' y lleve harto pañuelo desechable, se acordará de mi.

Si no ha visto el trailer, hágalo acá:

LA VIDA DE LOS PECES from sebastian olivari on Vimeo.

Saturday, June 12, 2010

Desahogo

La plata puede traer muchas alegrías, puedes comprar con ella lo que quieres o hacer feliz a otro, pero también se puede convertir en un elemento destructivo, puede romper amistades, fracturar confianzas, separar familias. Y pasó en la mía... y de tener media familia (post separación de mis papás) ahora tengo 1/4 y ha sido muy triste el proceso.
Lo es más todavía cuando pienso que mis primos sí tienen hermanos, pero yo no. Inevitablemente en algún momento mi familia será solo mi reflejo.
Es raro, porque considero que soy una persona sensible, más de lo que me gustaría reconocer. Las cosas me afectan más de lo que quisiera, a pesar de que he ido acumulando hartas penas con las que he tenido que aprender a vivir a la fuerza. Paradójicamente mi familia me considera fuerte, un apoyo, creen que las cosas no me afectan. Como que, pese a compartir el vínculo sanguíneo, han olvidado mi historial y me ven como una estatua de cera, inanimada. Y traté de cumplir con mi papel, pero esta vez no me resultó y me puse en evidencia.
Puede que no se note, pero la pena ha sido una compañera eterna que se manifiesta de vez en cuando y me hace llorar sola o lo suficientemente despacio para no ser descubierta.
Siento que algo me oprime el corazón y los ojos se ponen cristalinos... esta es aquella época del año y aunque trato de no pensar en eso, cuando me quedo pegada mirando el techo inevitablemente termino pensando cosas tristes. Y este año hay más cosas tristes que en 2009...